PATRONES MOTORES FUNDAMENTALES DEL MOVIMIENTO
Desde el momento en que el niño
nace, inicia, a la par que su crecimiento biológico, el proceso de
descubrimiento de su “yo” y del mundo que le rodea; el conocimiento progresivo
de sí mismo y de su entorno se fundamenta en el desarrollo de sus capacidades
de percepción y de movimiento.
El desarrollo perceptivo-motor
es el umbral desde el que se inicia el movimiento en el ser humano a partir del
momento en que abre los ojos a este mundo.
Se va dando a la par que el desarrollo
biológico (en donde se observan los cambios físicos relativos al peso y la
estatura).
El desarrollo fisiológico (en donde se
presentan cambios internos y externos que son más observables en el periodo de
la pubertad);
Los cambios psicológicos (en
donde la conducta se va transformando a medida que el ser humano crece, se
comunica y se interrelaciona con sus semejantes hasta llegar a conformar una
personalidad propia).
El proceso perceptivo-motor el
cual puede describirse como el proceso para alcanzar la coordinación de la
actividad motora (de movimiento) a través de la organización de los estímulos.
Las capacidades coordinativas
que se desarrollan a lo largo del proceso perceptivo-motor, representan los
puntos de partida para el aprendizaje de movimientos más elaborados que serán
posibles a través de la afinación de la coordinación, la cual se observa en una
ejecución cada vez más eficaz del movimiento.
El desarrollo perceptivo-motor
por tanto, es un proceso que se lleva a cabo en el niño desde que nace hasta
aproximadamente los seis o siete años de edad, por ser la etapa que resulta más
propicia para estimular cada una de las capacidades que conforman sus tres
componentes fundamentales: la corporalidad; la temporalidad y la espacialidad.
Los patrones fundamentales son más complejos
porque encierran una combinación de patrones de movimiento de uno o más
segmentos del cuerpo como los que entran en juego al caminar, correr, saltar,
lanzar, cachar etc.
Los patrones básicos de movimiento
han sido divididos en general por los estudiosos del tema en cuatro grandes
grupos: desplazamientos, saltos, giros y manipulaciones
Una vez comprendido lo
anterior, podemos asentar que las habilidades motrices básicas se pueden
definir como la familia de habilidades amplias, generales y comunes a muchos
individuos
Las habilidades específicas son
aquellas habilidades de movimiento cuya enseñanza está directamente encaminada
al aprendizaje de uno o varios deportes;
Las habilidades especializadas,
por su parte, son aquellas que se diferencian de la anterior clasificación
(habilidades específicas) porque la enseñanza, el aprendizaje y la práctica
misma de las habilidades, tiene como fin la competencia deportiva, en ocasiones
encaminada al alto rendimiento. Es aquí en donde se van trabajando a la par que
la táctica y la técnica propia de cada deporte, el acondicionamiento físico.
aporte por: JULIETH LÓPEZ SANCHEZ
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